Las secuelas de un terremoto no solo se evidencian con un número de fallecidos y heridos o con la cuantificación de daños materiales, sino por sus efectos en áreas como la educativa.
En ese ámbito, uno de los retos principales es retomar las actividades escolares y para ello debe aplicarse una atención integral a las familias, docentes y estudiantes.
Una vez tratadas las personas, en caso de afectaciones en la infraestructura del ramo, es necesario ubicar espacios temporales que brinden las suficientes garantías y luego entregar las herramientas físicas para trabajar.
Todos estos detalles se trataron en la presentación de la Guía de atención Curricular de Situaciones de Emergencia y Desastres, a propósito del terremoto del pasado 16 de abril y como parte de una alianza entre el Ministerio de Educación y la Unesco.
En los próximos días se socializará su contenido mediante foros y conferencias.
Confirmado.net / Gama TV